jueves, 10 de septiembre de 2009

Sin odio

No sabría decirte si escribo desde la tristeza de haberte perdido o desde la rabia. Mientras bebo una copa de venganza me doy cuenta de que más que nubes y lluvias de lágrimas, sobrevives en mis recuerdos alimentándote de mi rabia.

La rabia de saberte sin personalidad ni cojones. La rabia de verte usado como una mera marioneta al antojo de alguna que otra ignorante que no sabe ni lo que buscas. Que te llega al tobillo en cuanto a conocimientos de vida y muerte. Que no ve tu magia.

La vida es así. Y yo una conformista que me callo y silencio las pocas palabras que me quedan por decirte. Porque está prohibido, o te han prohibido. Aunque las mejores promesas son esas que no hay que cumplir.

Pero te veo imitando la felicidad, consiguiendo sonrisas fingidas y dando pasos en falso... y eso si me produce tristeza.

5 comentarios:

Lady of light dijo...

También hay dolor en tus palabras. Puede que no quieras verlo, pero el daño que te causa haberlo perdido también está ahí. Dicen que a cada uno le llega su San Martín y que, al final, todo vuelve a donde tiene que estar. Yo no sé si será verdad o no, ni hasta qué punto me interesa que se cumpla. Pero, te digo una cosa: no merece la pena que te agaches hasta su tobillo, seguro que no es rentable la energía gastada hasta llegar ahí abajo, que tú eres demasiado alta (en cuerpo y alma). Y, está claro, que la cultura no llega a todas partes.

irenita_gal dijo...

Sin odio, pero con muchas cosas que decir, y espero que algún día te armes de valor y se las digas a la cara, simplemente para que se de cuenta de que ser una marioneta, a largo plazo, de nada sirve.
Conservemos lo bueno, y dejemos a un lado lo que no aporte nada de ello en nuestras vidas.

Todo llega y todo pasa

Mi hoja arrancada dijo...

Las aguas siempre vuelven a su cauce. Los que se dejan llevar, algún día se sueltan y se los lleva la corriente.

kief dijo...

escriba algo, señorita! :)

fud dijo...

guau, vaya entrada