viernes, 22 de agosto de 2008

Paréntesis

Te marchaste y mis respuestas viajaron contigo. Al principio te admiraba y deseaba ser como tú. Al final sencillamente te amaba.

No soy como las demás, es cierto. Quizás no te abrazara después de hacer el amor o no te dijese lo que sentía por miedo a que huyeses despavorido. Quizás guardaba las palabras sinceras para después o quizás ni siquiera fuese capaz de pensar con sinceridad.

Puede que desde hace unos días sólo viva de recuerdos, que desde que te fuiste tu mirada me persiga. Puede que no haya pegado ojo pensando en ti o que haya dormido soñando contigo, ya nunca lo sabré. Sólo sé que no puedo dejar de leerte, que quererte es tan necesario como respirar y que mi vida se quedó vacía el día que dijiste adiós. Pero te marchaste, me dejaste, y ahora yo abandono mis palabras a un duro destino. Condenadas a no ser leídas como yo a no ser amada.

Sé que volverás y quizás entonces comprendamos los planes de la providencia. Puede que no me conozca a mí misma, pero si algo tengo claro es que vivir sin ti sería un ejercicio difícil, un problema con respuesta trampa, por eso sé que te necesito aunque sólo sea para ayudarme a calcular el resultado.

Te esperaré siempre. Tú en algún lugar, también me estás esperando.

Siempre tuya.

Sofía

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Esto es tuyo o está sacado de algún lugar? Si ha salido de esa cabecita loca que tienes, enhorabuena.

Estoy algo... trastocada. No puedo decirte a ciencia cierta la de veces que estoy segura de que voy a releer esto, pero se que muchas.

El miedo siempre nos detiene y por su culpa nunca realizamos lo que de verdad queremos. Todos tenemos miedo, y es imposible borrarlo de golpe, no tenemos una varita mágica que con un simple toque lo haga volar. Pero si algo se de verdad, es que llegan ciertos momentos en que una determinada situación requiere valentía, por la simple razón de que si no nos atrevemos no vamos a vivir nuestra vida tal y como queremos, sino tal y como quieren los demás. Eso no lo quiere nadie para si, pero desgraciadamente son más de los que deberían quienes no se plantean vivir de acuerdo a su forma de ser, de pensar y de sentir. No se si tendrá mucho que ver esto con el texto, pero Sofia (que desde su etimología significa sabiduría) es lo suficientemente sabia como para darse cuenta de lo que siente aunque no lo quiera admitir, el siguiente paso será admitirlo y asumirlo, y el siguiente por fín atreverse a ser feliz, que no cuesta tanto.
Pf, que peñazo tan inconexo, excuse-moi.

"Al principio te admiraba y deseaba ser como tú. Al final sencillamente te amaba". Fantástico.

Eres genial :)

Te mando un beso enormote enormote golfa (no recuerdo mi contraseña, soy la supermaldita de las narices)

Ana_SepulvedaG dijo...

Salió de mi cabecita loca, supermaldita... cosas del verano!! Me alegro que en cierto modo te haya dejado trastocada, creo que es buena señal.

Un besazo muy grande, que deseo mucho volver a verte!

P.D. El nombre del tio no lo pongo porque sencillamente no encuentro el apropiado para el hombre perfecto del que habla sofía!

supermaldita dijo...

A mí me pega Marcos.

kief dijo...

"por eso sé que te necesito aunque sólo sea para ayudarme a calcular el resultado.

Te esperaré siempre. Tú en algún lugar, también me estás esperando."


¡Es cojonudo, una carta como las antes!

Un saludo ;)

Ana_SepulvedaG dijo...

se hace lo que se puede, kief!!

Gracias, otro saludito para tí. ;-)

Anónimo dijo...

wenas anita!! weno k muy bonito tu blog xro muy largo sabras k no lo e leido entero ... xDD weno ya m pasare x aki d vez en cuando bSSS

Anónimo dijo...

Estas cosas son las que hacen que te adore más y más, que tu rostro, tu imagen siempre planen sobre mí marcando el destino de mi vida.

Prohibido