domingo, 11 de mayo de 2008
Escepticismo
De repente un silencio oscuro traza una linea divisoria entre mis dos mitades. ¿Qué más se puede pedir? Por fin mi doble personalidad salta a la vista. Como se vuelva a repetir una sola vez más tiro el puto vaso al suelo por no saber comprender si está medio lleno o medio vacío. La gota lo colmó. Si fue para bien o para mal me da absolutamente igual. Simplemente quiero una ciudad para mí donde el amor se llame con todos los nombres de todas las calles, de todos los pisos, de todas las habitaciones, de todas las camas, de todos los sueños, de todos los olvidos o los recuerdos. Pero el amor, esa palabra...
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3 comentarios:
doble personalidad?? o más bien múltiple?...eso sí, cada cual más encantadora que la anterior, pero de una en una por favor, ya que todas a la vez podría ser un desequilibrio bastante agudo.
Pues resulta que gente como yo, estaría dispuesto, con constancia, paciencia, buen gusto y estilo, a construir esa ciudad en la que el amor se escribe con todas las letras de los nombres de todas las calles de todos los pisos de todas las habitaciones y de todas las camas...al final, como ves, me he salido con la mia.
Tu título me ha enganchado, aunque no entiendo la unión con el texto. Los escépticos suelen creer que todo en la vida es tan subjetivo que lo único posible es emitir opiniones, y tú y yo, amiga mía, nos tambaleamos entre lo subjetivo y lo objetivo de vez en cuando y depende en qué.
Permítete tener doble personalidad, supongo que todos la tenemos, aunque yo no la llamaría una doble personalidad el todo, más bien tenemos cosas que no mostramos a todo el mundo. Y no te agobies, que también yo he derramado algún que otro vaso en un intento de hacerlo desaparecer.
En parte te entiendo, me he metido un poco en tu cabeza en ese momento; ya no te lo crees, y ahora investigas, has descubierto como, algo que creias, que esperabas junto, porque te gustaba así, se divide en esto o lo otro...y has pensado, porque no puedo tener todo a la vez. Y por un momento, ha caido en tu vaso lleno de agua y aceite(a mitades exactas), una gota de lo primero para irse al fondo, y ha dado un cambio a tu sed, si querías bebertelo entero, ahora solo te apetece aceite, por que no han podido caer dos gotas? una de cada? (esto solo es una metafora muy rebuscada, ya se que nunca pegarias un sorbo de aceite)
Que tengas suerte y se te pase el escepticismo, que sea gracias a hechos, y no a palabras, mala mujer...
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