martes, 1 de abril de 2008

¿Inicio?

¡Qué odio me producen las altas esferas!
Grandes tacones, kilos de maquillaje e hipocresía es la parte fundamental de su vestuario de putas divinas.
Lo peor, desgraciadamente, no es eso. Lo peor llega cuando todos los seres vivos intentan disfrazarse de león. Perdonen: Rey de la selva, ¡sólo hay uno!

Dejando gilipolleces a un lado me centro en las personas (con vida o sin ella) que me rodean. Y ¿qué es lo que encuentro? ilusión al comprobar satisfactoriamente que he llegado a la cima de mis propósitos con gente muy grande (en el sentido más intelectual que le podamos dar a este subjetivo adjetivo, valiendo así la redundancia)

Sin más rodeos vuelo, gracias al maravilloso invento de la imaginación (me pregunto quien será el genio que la descubrió) por los mundos perfectos de la geometría.
Porque cuando tenía que resolver problemas que me planteaban me parecía patético, y ahora que no debo hacerlo, me parece infinito y perfecto. Soy el perro del hortelano (no por lo de chucho, sino porque ni como ni dejo) ¡Qué pesada me pongo!

Y después de releer este cúmulo de ideas sin ningún destino ni importancia me doy cuenta de lo egocéntrica que puedo llegar a ser cuando escribo (y cuando no) y me doy asco (me, me, me... yo, yo, yo...) llegando a resultar pedante e insoportable.

¿Cierro hablando de los demás? Pues por ejemplo, algo que me ha llamado (a mí de nuevo) la atención esta mañana. Haciendo un descanso en mi frenética vida he visto:

San Agustín dijo: Una vez al año, es lícito hacer locuras.
Por tanto, que así sea.

6 comentarios:

Lady of light dijo...

Me ha sorprendido la publicación. Al principio andaba un poco perdida entre tanta selva de palabras, pero poco a poco me he ido centrando.
Sólo añado un comentario más por lo de tu final (que, por cierto, me ha encantado el enunciado): tal vez no pase nada porque no sólo hagamos locuras una vez al año y tengamos alguna que otra más. A mí me encantan (a mí a mí y a mí, no te preocupes, todos nos queremos mucho a nosotros mismos, sólo hay que saber llevarlo!!). Un besazo, manzanaprohibida.

Anónimo dijo...

si no fueramos egocentricos no podríamos vivir o yo por lo menos, q seria de cosas como mi cámara y yo.


cosas tan asi son lo q hace q seas grande, como los que te rodeamos (mas flores imposible echarnos)


buscando buscando he encontrado este blog, muy bueno, espero poder leerte pronto, ya que como veo este solo es el principio.


atentamente, regocijando entre avestruces

Facebrrr dijo...

Este texto me parece un gran comienzo a "la frenética vida de Ana"
Ayer cuando me lo leiste me encanto, y ahora que lo he leido con más atención no ha dejado de gustarme. Se nota que estás en pleno desequilibrio vital, pero eso me gusta, porque tus refleciones son geniales...y mis textos serán muy emotivos, pero este tuyo me ha dado mil vueltas...se nota que vales.
tu bohemia

Facebrrr dijo...

por cierto...para egocéntrica yo!
Todos tenemos el ego por encima de todo, muy pocos lo reconocen, y la mayoría pasa toda la vida sin darse cuenta. Yo al igual que tú,lo tengo muy asumido.

Anónimo dijo...

"Dios esta en todas parte porque es omnívoro" posiblemente la mejor frase de este dia puto, puto o raro. Te preocupas por una más de tus virtudes, egocentrismo-vanidad, mi cafetería ha dicho hoy que el principal problema de las xx son los desconchones en nuestro amor propio asi que yo digo hurra por esos devaneos tuyos con la primera persona...no es el dia de la inspiracion (definitivamente) quizás haya que pasar página o empezar un libro nuevo, mientras me recreare con tus erudiciones y espero que algun dia colguemos una versión remasterizada de Tigridia...sigue escribiendo y llamame para un paseo bohemio por la mejor ciudad del mundo.

Villain dijo...

¡Bienvenida al mundo bloguero! Espero que no te pase lo que a mí, que me venció la vagancia. (:

Escribe cositas, anda

Un beso